Principales molestias:
La intolerancia a la lactosa no produce unos síntomas específicos, por lo que pueden deberse también a otras causas.
- Región gastrointestinal:
Mareos, náuseas, dolor de vientre, sensación de estar <<lleno>>, ruidos en el estómago, vientre dilatado, vientre sensible ala presión, ardor de estómago, meteorismos, presión en el estómago, vómitos (especialmente en los niños), gases, flato, diarrea, estreñimiento, dolor intestinal, cólicos.
-Síntomas generales:
Sequedad en las mucosas (ojos, nariz, boca), mucosidad permanente en el cuello, piel y cabello grasientos o secos, mal sabor de boca, halitosis, lengua sucia, dolor de cabeza o migrañas, problemas con la comida, ataques de hambre repentinos.
-En casos crónicos:
Estados carenciales, aumento de la propensión a las infecciones (resfriados, infecciones, hongos, verrugas), dolores de las articulaciones, estados de agotamiento y generalmente cansancio, alteraciones del sueño y sueño no reparador.
-Síntomas psíquicos:
Cansancio crónico, agotamiento, estados depresivos, introversión, hiperactividad, dificultad de aprendizaje, inquietud, irritabilidad, agresividad, falta de motivación, falta de ilusión y de alegría.
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